La UE exige que el 70% de los RCD sea reciclado en el año 2020
La nueva legislación de residuos de la Unión Europea, muy enfocada en la economía circular, señala que en el año 2020 al menos el 70% de los Residuos de la Construcción y Demolición deberán ser reciclados, recuperados y revalorizados.
Otro objetivo de la normativa europea es la lucha contra las actividades ilegales, el fomento de la compra verde y el desarrollo de una fiscalidad ambiental adecuada
Los Residuos de la Construcción y la Demolición (RCD) suponen el segundo tipo de residuo en volumen y peso de la UE. Un 30% del total de residuos europeos son RCD, los cuales son reciclables casi en su totalidad; es decir, el vertido es mínimo y no se practica la incineración. Esto supone que el reciclaje de subproductos como férricos, plásticos, maderas…etc, sea completo. Todo proceso de revalorización de los residuos supone que se evite la extracción de recursos naturales.
En España, y concretamente en Andalucía los datos están muy por debajo de los objetivos europeos: menos del 20% de los residuos de obra -escombros- es recuperado y un 30% se abandona en el medio natural. Por otro lado, el 50% de los RCD son comercializados de forma irregular y procesados sin respetar la normativa vigente. Esto supone un vertido incontrolado con el consiguiente perjuicio al medio ambiente. Lo que podría ser una fuente de recursos, una materia prima en sí misma, se convierte en un residuo contaminante.
Los Residuos de la Construcción y la Demolición podrían ser un claro ejemplo de Economía Circular si todos los agentes implicados en esta actividad estuvieran concienciados de que el sistema productivo y de consumo lineal es perjudicial para las generaciones presentes y futuras.